D urante el embarazo es frecuente que surja la preocupación sobre el uso de los repelentes de insectos, las pacientes en su mayoría preguntan si su aplicación es segura o no. Es bueno comenzar diciendo que se recomienda evitar en lo posible zonas con alta densidad de insectos como mosquitos y garrapatas entre otros, para prevenir sus picaduras, no solo por lo incómodo que pueda resultar sino también por el riesgo de adquirir ciertas enfermedades como por ejemplo: la Malaria, Dengue, Fiebre Amarilla, Virus del Nilo Occidental y Enfermedad de Lyme.
DEBES SABER QUE: Las medidas que debes adoptar para evitar la picadura son mucho más importantes que el propio repelente en sí. Por eso te recomendamos:
Los repelentes de insectos son productos que se aplican directamente en la piel, ropa o mosquiteros con la finalidad de disuadir la fijación de garrapatas y de los insectos que pican incluyendo los mosquitos.
1. Aceite de Citronella
Citronella es el nombre popular del Cymbopogon, una gramínea de origen asiático (India, Tailandia, Vietnam, China), más conocida en todo el mundo como lemongrass por su aroma característico.
Su acción consiste en producir un efecto desagradable sobre las terminaciones sensitivas y un bloqueo de la percepción química de los insectos; de esta manera los ahuyenta. Sus principales ventajas son su: efectividad, olor agradable, baja toxicidad, ecológico, alta tolerancia.
Es adecuado para niños pequeños y mujeres embarazadas, aunque presenta el inconveniente de tener una eficiencia limitada y de NO mantener su acción durante mucho tiempo. Suele combinarse con otros compuestos en la formulación de repelentes.
De no ser efectivo el uso de la CITRONELLA se puede valorar usar repelentes con DEET
2. ¿Qué es el DEET?
DEET (N,N-ethyl-m-toluamide o mDET). Más información aquí.
La mayoría de los repelentes para insectos contienen del 10-25% de DEET en forma de crema, aerosol o aceite que se aplica directamente a la piel o ropa.
DEET lo usan aproximadamente entre 50-100 millones de personas al año, con pocos reportes de efectos secundarios dañinos. Sin embargo, NO se han realizado suficientes estudios en humanos referentes a la exposición al DEET en el primer trimestre del embarazo por lo cual si NO es necesario quizás lo más prudente es evitar aplicarlo. Por otro lado, existe suficiente evidencia científica que avala su uso seguro durante el segundo y tercer trimestre del embarazo, ya que no se ha demostrado un aumento de malformaciones congénitas o de problemas con la sobrevivencia, crecimiento o desarrollo del bebé en el primer año de vida.
D urante el embarazo es frecuente que surja la preocupación sobre el uso de los repelentes de insectos, las pacientes en su mayoría preguntan si su aplicación es segura o no. Es bueno comenzar diciendo que se recomienda evitar en lo posible zonas con alta densidad de insectos como mosquitos y garrapatas entre otros, para prevenir sus picaduras, no solo por lo incómodo que pueda resultar sino también por el riesgo de adquirir ciertas enfermedades como por ejemplo: la Malaria, Dengue, Fiebre Amarilla, Virus del Nilo Occidental y Enfermedad de Lyme.
DEBES SABER QUE: Las medidas que debes adoptar para evitar la picadura son mucho más importantes que el propio repelente en sí. Por eso te recomendamos:
Los repelentes de insectos son productos que se aplican directamente en la piel, ropa o mosquiteros con la finalidad de disuadir la fijación de garrapatas y de los insectos que pican incluyendo los mosquitos.
1. Aceite de Citronella
Citronella es el nombre popular del Cymbopogon, una gramínea de origen asiático (India, Tailandia, Vietnam, China), más conocida en todo el mundo como lemongrass por su aroma característico.
Su acción consiste en producir un efecto desagradable sobre las terminaciones sensitivas y un bloqueo de la percepción química de los insectos; de esta manera los ahuyenta. Sus principales ventajas son su: efectividad, olor agradable, baja toxicidad, ecológico, alta tolerancia.
Es adecuado para niños pequeños y mujeres embarazadas, aunque presenta el inconveniente de tener una eficiencia limitada y de NO mantener su acción durante mucho tiempo. Suele combinarse con otros compuestos en la formulación de repelentes.
De no ser efectivo el uso de la CITRONELLA se puede valorar usar repelentes con DEET
2. ¿Qué es el DEET?
DEET (N,N-ethyl-m-toluamide o mDET). Más información aquí.
La mayoría de los repelentes para insectos contienen del 10-25% de DEET en forma de crema, aerosol o aceite que se aplica directamente a la piel o ropa.
DEET lo usan aproximadamente entre 50-100 millones de personas al año, con pocos reportes de efectos secundarios dañinos. Sin embargo, NO se han realizado suficientes estudios en humanos referentes a la exposición al DEET en el primer trimestre del embarazo por lo cual si NO es necesario quizás lo más prudente es evitar aplicarlo. Por otro lado, existe suficiente evidencia científica que avala su uso seguro durante el segundo y tercer trimestre del embarazo, ya que no se ha demostrado un aumento de malformaciones congénitas o de problemas con la sobrevivencia, crecimiento o desarrollo del bebé en el primer año de vida.